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Andy Lamb iba a diálisis tres veces a la semana y solo un donante podía salvarle la vida
Samantha Lamb se arrepiente de haberle donado un riñón al que ahora es su exmarido. El «Daily Mail» recoge la historia de esta británica de 41 años, protagonista de una historia de amor rota por culpa de la infidelidad.

La historia de esta mujer y su pareja, Andy Lamb, se hace pública en la BBC hace unos años. Ambos representaban el amor más puro, la solidaridad y entrega más desinteresada, después de que Samantha decidiera donar un riñón a su marido, enfermo de insuficiencia renal que solo podía mantenerse vivo gracias a las interminables sesiones de diálisis que recibía.
Acabar con esa «pesadilla» solo era posible con un transplante. Y Samantha era compatible. «Él necesitaba un nuevo riñón. De lo contrario moriría. Iba tres veces a la semana a diálisis», recuerda la mujer. Así que no lo dudó ni un momento. Tras perder 19 kilos, ingresó en quirófano en octubre del año 2009 para extirparse uno de sus riñones, el «salvavidas» de su marido.
A pesar de esta nueva oportunidad que les dio la vida, el matrimonio Lamb se rompió en verano de 2012 tras cinco años casados. Según recoge el «Daily Mail», Samantha denuncia que su marido le fue infiel y la abandonó por una amiga.
«Le odio. Si pudiera, cogería el riñón y se lo donaría a otra persona que de verdad se lo merezca», reconoce Samantha.
Sin embargo, Andy Lamb se defiende de las acusaciones de su exmujer: «Yo la amaba, pero nuestra relación no funcionó y a pesar de lo que Samantha cree, nunca he estado con su amiga». Aunque reconoce que siempre le deberá la vida, cuenta que nunca quiso que le donase el riñón «porque suponía un gran riesgo, pero ella insistió».

Daily Mail

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