Prisiones con huertos ecológicos sin pesticidas, niños que cumplen condenas junto a sus padres o "celdas" con baño y cocina independiente son algunos ejemplos de cómo viven algunos privados de libertad en otros países. Así como los privilegios de los que gozan los reos del Penal Punta Peuco en Chile, en el resto del mundo hay singulares cárceles con sistemas penitenciarios que incluyen desde vivir con la familia, hasta cultivar una vida ecológica.
AUSTRIA
La arquitectura del Centro de Justicia Leoben, ubicado en Austria, confunde al asemejarse más a un edificio de negocios más que a una verdadera cárcel. Con una capacidad para 205 reos, la cárcel posee habitaciones con baño y cocina independientes, ventanas de cristal irrompible de suelo a techo, escritorio y estanterías.
ESPAÑA
La cárcel de Aranjuez permite a los condenados vivir con sus familias. Según una publicación del ABC España, en el penal viven 23 niños que cumplen junto a sus padres condenas por estafa, asesinato e incluso terrorismo. Según cuentan los mismos presos, las necesidades básicas están cubiertas por completo, por lo que ahorran los 450 euros que ganan mensualmente por los trabajos realizados dentro de la misma prisión.
NORUEGA
En isla de Bastoey, se encuentra la particular cárcel ecológica que es capaz de autoabastecerse de comida con huertos propios, en los que no se utilizan agentes químicos ni pesticidas, de acuerdo a la publicación de NBC News. Además cuenta con un sistema de energía solar. La idea del esta prisión es que los reos internalicen el sentido de la responsabilidad medioambiental.
COLOMBIA
Pablo Escobar, el narcotraficante colombiano más peligroso de sus tiempos, pasó un año recluido en la cárcel de alta seguridad de Envigado, cerca de Medellín. La cárcel no tenía celdas, rejas ni áreas restringidas. Al contrario, Escobar gozaba de lujos como jacuzzi, gimnasios con los equipos modernos y aire acondicionado, de acuerdo a una publicación del diario español El País.
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